Amados hermanos:
¡Cuán fuerte es la corriente del mundo! ¡Cómo debemos luchar contra ella todos los días y cada vez con más fuerza! Es muy triste ver cómo los que no están firmes en el Señor, simplemente, sucumben.
Hermano, recuerda siempre lo que dice el Señor con toda claridad:
«Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.» — Hechos 5: 29
Muchos se defienden cuando se les enfrenta a sus pecados, diciendo: «pero si solo he hecho lo que todo el mundo hace». Obviamente la respuesta es: «por eso caíste en desgracia, pues debiste hacer lo que todo el mundo no hacía, pero que sí está escrito en la Palabra; solo se trataba de ser obediente a quien te creó».
La lucha es fuerte, pues el corazón dañado del ser humano tiende a desear y, aún, amar lo que es contrario al querer de Dios, lo cual es profusamente promovido por el mundo y los demonios. Por ello, su voluntad se inclina y finalmente doblega a la desobediencia, demostrando así que no es libre, sino un sirviente del pecado. En realidad, sin usar el poder transformador del Señor, resulta imposible hacer lo que es correcto, a lo más, alguien podría acercarse a una conducta aceptable, pero siempre estará en falta, ya sea por su fragilidad en el sentir, por la debilidad de su voluntad o por la deficiencia de su razón.
¡Resiste, hermano! El Señor siempre es claro y nos dice por medio de Pablo:
«¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia?» — Romanos 6: 16
Pastor Sergio Oschilewski Malinowski Iglesia Bíblica Las Condes
📖 LEE EL BOSQUEJO EN:
https://iglesiabiblicalascondes.cl/mensajes/la-necedad-del-yo/