Estimados hermanos en Cristo:
No creo exagerar al decir que hoy, como nunca en la historia de la humanidad, la familia se encuentra agredida por filosofías y acciones que se infiltran en su intimidad. Los niños, los adolescentes, los jóvenes, así como la gente madura, reciben en forma incesante una lluvia de ideologías que motivan a la separación, e incluso al odio, al interior de los grupos familiares.
Puede suceder que, a pesar de la piedad y la paciencia demostrada por los pilares de la familia, la paz y unidad familiar no se puedan alcanzar, pues hay posturas francamente anticristianas que un hijo de Dios no podrá pasar por alto, aunque provengan del ser más amado.
En esta oportunidad, les motivo a orar con fervor por la limpieza, santidad y unidad de los miembros que conforman nuestras familias.
«Dios trastornará a los impíos, y no serán más; Pero la casa de los justos permanecerá firme.»
— Proverbios 12: 7
Sergio Oschilewski Malinowski
Pastor Iglesia Bíblica Las Condes